martes, 26 de diciembre de 2023

AUTÉNTICO NACIMIENTO

Para cuando llega la Navidad, ella está agotada. Parece desentonar con la algarabía y la fiesta. Siente la imperiosa necesidad de guardarse en sincronía con el invierno recién llegado. Anhela entrar en los confines del Silencio para sentir auténticamente el renacer de la luz crística.

La historia del niño nacido en un pesebre es un relato sublime, sin embargo, es hora de encarnarlo en su templo interior. La semilla, largamente guarecida brota robusta con el potencial de poblar un reino, el suyo…  Nadie puede hacerlo en su lugar.

Es tiempo de recibir el regalo más preciado. El recuerdo intacto en la memoria cósmica. El mismo Verbo antes de encarnar; previo al quebranto, la confusión y el olvido.

Ella restaura su corazón y purifica su intención. Siente la paz del recogimiento y también dice: “Sí”. Lleva su propia ofrenda hecha de letras, huesos y muérdago.

Ella quiere servir al Amor, amando; a la Luz, brillando y a la Vida, viviendo.

Para cuando llega el fin de año, ella se ha hecho una promesa…

 

Imagen tomada de internet

lunes, 27 de noviembre de 2023

AÑORANZA DE TU AMOR

He deambulado en este mundo con la añoranza de tu Amor. Me perdí entre laberintos y espejos rotos buscando lo que ya llevaba dentro. Me sentí tan diminuta como una mota de polvo y tan insignificante como un grano de arena, exigiendo a otros llenar el abismo que yo misma cavé por percibirme lejana y separada de ti.

 Reclamé a mis padres en vez de agradecerles la Vida.  Me creí la historia de abandono cuando en realidad, era el humus para una vida fecunda; el detonante de una épica que iniciaba con una búsqueda. La duda me habitó…

Hoy, no necesito morir para sentir la Vida eterna si tu Presencia toda Abarcadora ocurre aquí y ahora en cada respiración, en cada pulsación del corazón. Ya no eres un Dios lejano ni distante, ahora te siento tan cerca y tan dentro. Si el abandono ha de ser mi estigma en esta encarnación, entonces me abandono en tu amor. Haz de mi corazón, tu morada…

El patriarcado ya no hace eco en mi memoria. No voy a llamarte “Señor”, ni “Padre”; cualquier título es impropio y tan inadecuado.  ¡Si eres inefable! Ha sido nuestra necesidad humana nombrarte; achicarte para que quepas en nuestro diminuto entendimiento, sin embargo, no quiero entenderte. De ahora en adelante solamente quiero experimentarte.

Hazme sentir el Misterio de tu Amor. Llena mi vida de sentido y significado. ¡Qué no deseé otra cosa que servirte con mis letras!

Toma mi pluma y escribe… que mi corazón sabrá leerte entre líneas. 


                                                                        Imagen tomada de Pinterest


miércoles, 1 de noviembre de 2023

ENCOMIENDA

 

Cansada estoy de la búsqueda.

De las trampas, de los lugares que no llevan a ninguna parte.

De las voces estridentes, los disfraces y las máscaras.

De los laberintos y los espejos rotos.

Cansada de dudar.

De cargar el mundo en mi espalda.

Cada día me pregunto el sentido de mi vida.

La respuesta está en el Silencio Reverente.

Regreso a ti después de una larga búsqueda, pero no te encuentro en esa cruz. Tampoco estás en el sepulcro. Te encuentro en la cima de una colina irradiando luz. Portas una túnica y unas sandalias. Me dices que me has estado esperando. Me recibes con alegría, no te importa lo perdida que estuve. Llego manchada de mi plumaje. “No pude atravesar el pantano sin ensuciarme” te confieso apenada. Me abrazas y tu luz me reconforta. Me acompañas al Lago de la Restauración donde me sumerjo. Mi propio bautismo. Me llevas a un jardín donde has dispuesto una mesa y una silla para mí. Me invitas a escribir. Conoces mi don. La escritura me sana y me salva. El espejismo del sinsentido desaparece. Veo un mundo fantástico, me pides que lo muestre.

Es una encomienda.  


                                                           Imagen tomada de pinterest

jueves, 31 de agosto de 2023

CAMBIO DE ESCENARIO

 

El escenario cambia detrás de ella. El verano con sus lluvias, se despide. Las semillas se nutrieron dentro de la tierra y brotaron. Su jardín se ve florido con mariposas revoloteando y abejas recolectando el polen. Se despojó de los hierbajos. Puede sentarse a disfrutar la vista acompañada de una taza de té. Siente la inminencia del otoño, su estación favorita. Una sonrisa aparece en su rostro. Sabe con el corazón que la cosecha será buena. Todo llega a su tiempo. Apresurar los ciclos es imposible. Ha aprendido las lecciones. Bebe un sorbo y escribe en su diario. Ama escribir.  




lunes, 19 de junio de 2023

EL ÚLTIMO RITUAL

 Llegué al campo de lavandas para hacer el último ritual. Ya era tiempo de sanar el olvido.  Llevaba conmigo unas cartas, el testamento, una fotografía de nosotros, entre otras cosas. 

Extendí el mantelillo blanco sobre la hierba fresca. Formé un ramito de lavandas recién cortadas y acomodé los objetos que llevaba creando un improvisado altar. Hice una pequeña fogata y encendí el fuego junto con la vela azulada. Cerré los ojos y respiré profundamente. “De mi conciencia local a la conciencia del Uno” dije en forma de oración juntando las manos a la altura del pecho. Después me hinqué agachando la cabeza reverentemente. 

Frente a tu fotografía honré tu Vida y la mía. Tu corazón y el mío. Agradecí nuestra historia con todos sus matices. Fuimos dos almas valientes que escenificaron el guion prenatal. Olvidamos el pacto y lo que pasó después lo vivimos dramáticamente. ¡Te culpé de la herida que yo misma había escogido! Escogí la bolsita azul en cuya etiqueta se leía: Abandono. El ángel me había dejado elegir. Y después me llevó a la Sala de los Acuerdos… luego al Salón de los Talentos y finalmente al Túnel de Luz que me condujo al bendito vientre de mi madre.  Al descender, la velocidad vertiginosa nos confundió. ¡El problema fue el olvido!

 Cuando nos reencontramos, en mi adultez, yo estaba muy dolida y tú, te sentías indigno. Aun así, lo intentamos papá. Las páginas de la infancia y la adolescencia se quedaron en blanco, sin embargo, escribimos nuevas. Mis hijos tuvieron un abuelo. Y nosotros, hicimos lo que pudimos. Hoy que ya no estás me pregunto ¿valió la pena? Y la respuesta es un “sí” rotundo. Que el intento sea la ofrenda. Guardé silencio ante la Sacralidad del momentum. Decidí soltar nuestra historia y quedarme con la Vida, el corazón sensible y lo que por derecho propio me corresponda.

Recogí mis cosas cuando sentí una llovizna que apagó la pequeña fogata. Agradecí a la madre Tierra por contenerme y me alejé sintiendo el sol en mi espalda. Me esperaban en casa.

En la noche viniste en un sueño papá.  Me regalaste un banco de madera, hecho con tus manos. 

Supongo que estamos en paz.

Imagen tomada de pinterest

sábado, 10 de junio de 2023

EL DESGASTADO DISFRAZ DE MADRE

(VERSIÓN ACTUALIZADA) 

Después de haber cocinado de mala gana el desayuno, Mariana se preparó lo único que le provocaba un efímero placer: Su café americano hecho en prensa francesa. Subió con desgano las escaleras. Cuando notó un extraño baúl de cuero rojizo con dos broches de metal a cada lado y unas correas maltrechas, dejó la taza de café sobre la mesilla que adornaba su recámara. “¡Otro trique más!” exclamó entornando los ojos y asumiendo que había sido adquirido por su esposo sin consultarla. Parecía muy antiguo, aunque bien conservado. Con curiosidad abrió los broches para hurgar en su interior.  Había algunos ropajes y telas de diversos colores y texturas, además de algunos objetos que la hicieron creer que más bien se trataba de disfraces. Un amarillento y descarapelado papel apareció entre las telas. Tenía escrita en tinta negra, una frase:

“Para usarlos, es necesario que primero empaques tu desgastado disfraz de madre.”

 Mariana se miró al espejo, sólo para encontrar el rostro de una mujer ojerosa, sin brillo en la mirada y con las líneas de expresión acentuadas en la comisura de los labios y en el entrecejo. Unas lágrimas escaparon de sus ojos marrones, los cuales evocaban las hojas terracota del otoño.  El mensaje era breve, aunque contundente.  Había pasado demasiado tiempo encarnando el rol de madre. Efectivamente, ahora le pesaba como un disfraz que ya no podía quitarse. Lo había intentado, sin embargo, parecía llevarlo adherido a la piel. “¿Cómo dejar de ser la protagonista en la vida de mis hijos?” se había preguntado tiempo atrás sin obtener la respuesta.

 Se desnudó y observó su cuerpo de mujer con las huellas de la maternidad en su vientre y en sus senos.  Para nada era perfecto, sin embargo, había una belleza en sus curvas y pliegues. Se quedó así un largo rato. Cuando sintió frío buscó en el baúl y se puso lo que parecía un disfraz de amazona: Falda corta, peto largo, unas sandalias que se ataban a las pantorrillas y un par de flechas con un arco.  Se recogió el cabello en una coleta. Aquel traje le ajustaba bien. Empezó a recordar todos los planes que puso en pausa debido a la maternidad. Tal vez era tiempo de rescatar sus talentos e iniciarse en algún arte. Una luz de esperanza brilló en su atribulado corazón.

Después encontró una túnica morada, una capa y un sombrero que también se probó. Se desató el cabello. Lo que parecía una varita mágica completaba el atuendo de una bruja. Divertida, la agitó conjurando: “Abracadabra”. Acto seguido sintió un calor que emanaba desde su pecho. Su sabiduría interna despertaba de su letargo. De pronto tuvo la comprensión de que ya no tenía sentido querer cuidar lo que no necesitaba ser cuidado. Sus tres hijos ahora eran jóvenes adolescentes que más bien requerían la fuerza de lo masculino para enfrentarse al mundo. Tuvo la visión de que su amor podía volverse sofocante y paradójicamente le haría daño a quienes más amaba. Miró en retrospectiva los años que había dedicado a sus hijos. ¡No lo había hecho nada mal!

Había llegado el momento de dar unos pasos atrás para no estorbar el despliegue de sus incipientes alas.

Su atención se fijó en las telas rojas que quedaban en el baúl. Era un vestido rojo semitransparente de velos con brillantes lentejuelas. Cuando se lo puso se sintió tan sensual que comenzó a bailar y a cantar. ¡No podía parar! Una risa curativa salió de lo profundo de su alma. Una energía creativa y vibrante le recorrió el cuerpo… ¡Había magia en aquellos atuendos!

Al fondo del baúl encontró otro mensaje:

“Puedes volver a vestirte de madre y sentirte deprimida el tiempo que quieras.”

—¡No, ya tuve suficiente! — dijo en voz alta.

Juntó sus manos acercándolas al corazón y haciendo una pequeña reverencia susurró:

—Hijos míos tienen mi bendición.

Ahora sus lágrimas eran de gozo por haber cumplido la sagrada encomienda de la maternidad. Era tiempo de mirarse a sí misma. Sus sueños la esperaban del otro lado del arco iris.

 Pronto partiría.

 

Imagen tomada de internet

lunes, 20 de marzo de 2023

LA PRIMAVERA HA LLEGADO

 Ella, despierta del letargo. Sale de la oscuridad nutricia del invierno que ya se marcha. Camina descalza por la tierra húmeda y se alinea con la madre Natura. La vida nueva se asoma en forma de tímidos brotes que con el calor del sol crecerán. Son una promesa.

 También ella se promete plantar semillas de Fe, Entusiasmo, Paciencia y Gozo.  Está decidida a arrancar los hierbajos de la Duda y el Desánimo. Abonará pequeñas acciones que la muevan hacia su destino. Ya no tiene veinte años, es una mujer que se valora a sí misma. Quedaron atrás los desvíos y las distracciones. Ahora sabe lo que quiere y lo que no. Es inmune a los chantajes. Está diseñando una versión más elevada de sí misma, pagando el precio que conlleva. Toma distancia cuando es necesario y su intuición le dice cuándo acercarse. A veces, parece solitaria, sin embargo, está consigo misma. Se recrea en sus placeres.

El ciclo de la renovación comienza ¿Lo tomas o lo dejarás pasar de largo? Escucha que le pregunta una voz en su interior. “Lo tomo” contesta al tiempo que un rayo amarillo la toca tibiándole el alma. Respira hondo abriendo el pecho y extendiendo los brazos.

 Así, recibe la primavera.

 



Imagen tomada de Pinterest


viernes, 17 de marzo de 2023

10 AÑOS

 Casi sin darme cuenta mi blog escribanadelalma.blogspot.com cumple 10 años. Este proyecto empezó cuando quise darme un espacio para plasmar mis textos. Ahora que releo el contenido, también recorro una década de mi vida con todas sus experiencias y emociones. Muchas veces me escribo a mí misma, pero también escribo para otros, lo sepan o no. Aunque los temas y los motivos que me llevaron a escribir son diversos, hay algo que comparten: la intimidad del alma. Porque cada vez que escribo se me abre el corazón.

Mis primeros escritos, cuando era adolescente, fueron movidos por la fe y la religión. Le escribía a Jesús crucificado. Después la escritura se tornó romántica al tiempo que despertaban mis hormonas y me convertía en una joven mujer. En algún punto la escritura fue terapéutica, para sobrevivir la adolescencia. También fue puerta para descubrir lo reprimido en mí, la herida de abandono paterno. Durante mucho tiempo, el motivo fue ese dolor. Por más que escribía no dejaba de sentirlo y quizá fue en ese momento que creí que el reconocimiento podía sanarme. Así que lo convertí en el nuevo motivo. Se instaló en mi psique esa idea que sólo me llevaría a recorrer un camino de gran frustración. Un encuentro con la psicología de lo femenino cambió mi visión de vida y por ende mi escritura, sin embargo, el motivo se había alojado como un tumor maligno. Poco a poco, llegaron la Fantasía y la Magia. Tuve una revista electrónica, una página web, escribí en medios locales, participé en concursos, autoedité 3 libros y el reconocimiento nunca llegó. A mis 54 años es tiempo de cambiar la motivación interna. No es que no me hubiera dado cuenta, es que en verdad no era capaz de hacerlo. Era algo que rebasaba mi entendimiento.

Hoy es tiempo de honrar mi camino de letras, con todas sus desviaciones. Leí en un extraordinario libro, que por cierto se parecía a la fantasía que escribo, lo siguiente: “Es tu momento de verdad. Puedes o bien, quedarte estancado y vivir en el ayer o ir paso a paso hacia las puertas de la posibilidad de la vida que estás destinado a vivir. El único precio por pagar es liberar cualquier enojo, herida, preocupación o resentimiento que te aten a tu vieja historia, además tener la claridad y la fuerza para empezar de nuevo. Cada momento es una segunda oportunidad de desatar y reclamar el propósito de vida y la contribución que es tu destino. La única promesa es que las puertas de la vida se cerrarán, así que sólo quedan momentos significativos para vivir y amar. Permanecer estancado o ir hacia adelante. La elección como siempre ha sido tuya.” (del libro Life´s golden ticket de Brendon Burchad)

Hoy tomo estas palabras. El autor jamás sabrá lo esencial que fue para mí, leer su libro. De la misma manera, tampoco puedo saber si el contenido de mi blog le ha servido a alguien. Al final, no es el autor, sino la obra la que importa. Es entrar a esa corriente creativa que nos arrastra y donde la personalidad ha de disolverse para sentir lo Abstracto. Elevados ya en esa dimensión, el alma sólo copia lo que ya existe en la Memoria del Todo. Toda esa vorágine emocional ha de transformarse en arte. La forma que toma mi arte es la palabra escrita, así que seguiré abriendo el corazón siendo fiel a mi alma de escribana.  


Imagen tomada de Pinterest


miércoles, 8 de marzo de 2023

4 LUNAS

 Cuatro energías danzan dentro de mi ser mujer:

La luna creciente:  la amazona, en la luz, la que se fija metas y las consigue,

la entusiasta, la solidaria, una en sí misma. En la oscuridad; la acorazada,

la justiciera, la impenetrable, la que se mutila, la que echa de su vida a los hombres.

La luna llena: la madre, en la luz, la que nutre y sustenta, la contenedora, la que cocina y alimenta, la que abraza y protege. En la oscuridad; la que no suelta, la chantajista, la inconforme, la que corta las alas de sus hijos.

La luna menguante: la hechicera, en la luz, la amante, la que se entrega al placer de ser ella misma, la sensorial, la de la buena escucha, la receptiva, la que abre las piernas, la que se viste de velos. En la oscuridad: la que se vende, la que hechiza a los hombres y los manipula, la superficial.

La luna nueva: la sabia, en la luz, la chamana, la bruja, la que habla con la luna, la que escucha su cuerpo, la que hace rituales, la que no le teme a la muerte. En la oscuridad, la que se aísla, la que pierde contacto con la realidad.

Soy todas y cada una de ellas.  A ratos,  por temporadas o por etapa de vida.  Las siento, las reconozco y las integro. Energías arquetípicas y poderosas. Me rindo ante ellas y me regocijo por ser mujer.  


 


lunes, 2 de enero de 2023

INVIERNO INTERIOR

A Ella, la envolvió una Nostalgia en la última noche del año.  La única forma de alcanzar a todos los ausentes fue imaginando un cálido abrazo de luz. Después agradeció en Silencio. Se atavió con colores festivos. La ocasión requería bulla, fiesta y copas de champaña. Celebró el Año Nuevo como tantos millones en el mundo. La Esperanza resurgió en el corazón de la humanidad.

Ahora que todos se han ido, ella vuelve a su invierno interior. Es tiempo de recogimiento. Se oculta bajo la tierra y aunque, suspira por los fracasos del ayer ya no los llora. Ahora comprende que sólo fueron experiencias. Marcadores en el mapa de la vida. Los días cortos la obligan a bajar el ritmo. Se toma las cosas con calma. Todos los pendientes se resolverán a su debido tiempo.

Mientras tanto, bebe infusiones para calentarse el cuerpo y el alma. Las noches largas y heladas son el momento perfecto para perderse en sus visiones. Contempla la esfera de las mil posibilidades y toma una docena. Brincan traviesas entre sus manos como pelotas de luz. Tienen todo el potencial. Sólo tiene que enforcarse. Desear, sentir y activar su poder creador. Le ha llegado una información codificada que le recuerda que nunca se deja de aprender. Amante del Conocimiento, estudia pacientemente…

 Ella, como la Naturaleza que está guarecida a la espera del próximo ciclo, también prefiere guardarse. Está gestando una nueva versión de sí misma. La ha llamado: "Regénesis".



                                                 Imagen tomada del libro "The way of the witch"

                                                               Sally Morningstar Red Wheel